¿Con qué aceite se fríen las torrijas?
La Semana Santa suponen una puerta abierta a pequeños excesos de dulces y fritos! Pero debemos intentar tener buenos ingredientes y, sobre todo, controlar bien el aceite con el que freímos estos empapados trozos de pan. Pero la decisión de que aceite utilizar variará de nuestros gustos, disponibilidades e incluso de nuestros presupuestos.
Las torrijas son, sin lugar a dudas, el dulce estrella de la época de Cuaresma y Semana Santa en la gastronomía española. Se preparan y comen a lo largo y ancho del país, en restaurantes, pastelerías y hogares. Pero lejos de lo que pueda parecer, hacer una buena torrija no es fácil. Además, la variedad de recetas de torrija es amplia, de vino, leche o almíbar, rebozadas en azúcar y canela, fritas, al horno, rellenas y mucho más.
Aceite de oliva virgen extra, refinado, aceite de orujo de girasol…La variedad de aceites vegetales es alta y debemos tener claros algunos factores. De este modo, valoraremos el coste, la resistencia, el sabor o el punto de humeo, claves para freír torrijas.
La cuestión es analizar varios pros y contras, como pasa con el resto de frituras, aunque ciertos gurús del aceite recomiendan AOVE para cualquier tipo de fritura, sabemos que no en todas las casas esta máxima se cumple. En cualquier caso, analicemos las ventajas y desventajas en cuanto al precio, sabor y punto de humeo.
¿Freír torrijas en aceite de oliva o girasol?
Sabor
Generalmente cuando hacemos torrijas preferimos aceites más neutros o más planos de sabor que no invadan. El aceite de oliva es la opción más tradicional y popular para freír torrijas debido a su sabor y aporta un toque especial al plato. Además, el aceite de oliva virgen extra, con su sabor característico, puede mejorar el perfil de sabor de las torrijas.
Por otro lado, el aceite de girasol es una opción más neutra en cuanto al sabor, por lo que las torrijas tendrían un sabor menos distintivo en comparación con aquellas fritas en aceite de oliva. Sin embargo, el aceite de girasol tiende a ser más económico y tiene un punto de humo más alto, lo que significa que puede soportar temperaturas más altas sin quemarse, lo que puede ser útil si estás preocupado por el control de la temperatura durante la fritura.
- Aceite de oliva virgen extra: sabor pronunciado
- Aceite de oliva virgen: ligero
- Aceite de oliva: neutro
- Aceite de orujo de oliva: neutro
- Aceite de girasol: neutro
Precio
Salvo para ciertos paladares, la decisión de compra también se orienta por el precio, y aunque sea puntual, una fritura requiere una cantidad elevada de aceite:
- Aceite de oliva virgen extra: más caro
- Aceite de oliva virgen: algo más accesible
- Aceite de oliva: asequible
- Aceite de orujo de oliva: asequible
- Aceite de girasol: asequible
Punto de humeo
El punto de humeo no es demasiado relevante para hacer torrijas porque es un producto que se fríe relativamente pronto. Por este motivo, no es fundamental que llevemos al aceite al punto de casi quemarse:
- Aceite de oliva virgen extra: entre 160º y 180º
- Aceite de oliva virgen: entre 180º y 215º
- Aceite de oliva: entre 180º y 215º
- Aceite de orujo de oliva: entre 230-240ºC
- Aceite de girasol: entre 210º y 230º
Para saber si el aceite ha alcanzado la temperatura adecuada, si no disponemos de termómetro de cocina, echaremos en el aceite una cáscara de naranja. Cuando esta chisporrotee ya podremos introducir las torrijas, manteniendo el fuego a media potencia y volteándolas para que se frían por las dos partes.
La temperatura del aceite ha de estar bien caliente (como en toda fritura), y en el caso del aceite de girasol, menos estable que el de oliva, hay que tener más cuidado porque soporta peor la temperatura. No obstante, siempre hay que desechar el aceite tras la fritura de una cantidad determinada de torrijas, aproximadamente 16-18 unidades, y mantenerlo limpio.
Bastan dos minutos para freír cada torrija (un minuto por cada cara), pero es importante echarlas como mucho de dos en dos para que el aceite no se enfríe. Por otro lado, puntualizamos que el aceite sea nuevo para que esté libre de sabores y aguante mejor la fritura de nuestras torrijas.
El mejor aceite para freír torrijas
En resumen, freír las torrijas en aceite de oliva proporcionará un sabor más característico y auténtico, mientras que el aceite de girasol ofrece una opción más neutral y económica con un punto de humo más alto. La elección final depende del sabor que prefieras y de tus consideraciones sobre la temperatura de fritura y el presupuesto.
Desde Aceite del Campo promovemos la cultura del aceite de oliva virgen extra como un producto Gourmet, que debe cuidarse y saborearse como un buen vino.