Aceite Valdecuevas
El Pago de Valdecuevas, situado a 850 metros sobre el nivel del mar, alberga una almazara en el epicentro de una plantación de 150 hectáreas. Aquí se cultivan las variedades de aceitunas arbequina, manzanilla cacereña y picual. La altitud de esta ubicación asegura grandes variaciones de temperatura entre el día y la noche, lo que favorece la calidad aromática de los frutos y dota al aceite de matices únicos y exquisitos.
Empleamos técnicas de cultivo modernas y exigentes, siempre con un profundo respeto por el entorno natural. El resultado es un aceite de oliva virgen extra (AOVE) de calidad excepcional, extraído en frío a partir de olivos arbequinos cultivados exclusivamente en el Pago y utilizando únicamente aceitunas verdes recolectadas a principios de la cosecha. Estas aceitunas son procesadas en su estado organoléptico óptimo mediante procedimientos mecánicos, lo que garantiza un aceite enriquecido con niveles superiores de ácido oleico y tocoferoles (vitamina E), en comparación con la media de esta variedad.
Aceite Pago de Valdecuevas
El aceite de Pago de Valdecuevas se distingue por su intensa fragancia con notas vegetales y sutiles toques de manzana. En boca, ofrece una experiencia amplia y compleja, con un equilibrado y ligero amargor y un picor final. Este aceite es ideal para aliños, consumo en crudo, así como en repostería y chocolatería, siendo un componente esencial de la Dieta Mediterránea.
En nuestra empresa, tratamos los olivares con el máximo cariño y dedicación, poniendo el alma en cada proceso. Esto nos permite producir aceites de oliva virgen extra considerados entre los mejores del mundo, directamente desde el corazón de Castilla. Combinamos paciencia y sabiduría en cada uno de nuestros productos, amando y respetando nuestra tierra.
Para conservar la calidad del aceite, se recomienda almacenarlo en un lugar fresco (entre 15ºC y 25ºC), y alejado de la luz y de olores. Además, el envasado se realiza únicamente bajo pedido, garantizando su frescura y excelencia.
